Zona noble del atún por excelencia, el solomillo de atún de aleta amarilla es uno de esos bocados que concentran todo el sabor del pescado. Sobre una tosta y con un poco de mermelada de tomate o cebolla es una auténtica delicatessen.
El solomillo es una de las partes más nobles del atún, situada en la zona superior del lomo. El solomillo de atún tiene una textura tierna y jugosa, con un sabor sorprendente.
Además, contiene los valores nutricionales del atún de aleta amarilla, por lo que aporta múltiples beneficios a la salud. El proceso de elaboración del solomillo de atún en aceite de oliva es el siguiente: primero se descabeza el atún, desangra, eviscera y despieza.
Posteriormente, se cuece con agua y sal, se enfría, se limpia y se corta. Se estiba en la lata y se le añade aceite de oliva, se cierra, y se somete a un proceso de esterilización para que el producto queda libre de gérmenes.
El solomillo de atún en aceite de oliva se presenta en latas estuchadas y listo para consumir. El producto debe almacenarse en un lugar fresco y seco, a resguardo de la luz solar. S
Una vez abierto el envase, se debe mantener el producto en frío a una temperatura de entre 0º y 4ºC, no más de 5 días.
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